De esto que se te humedecen los ojos y no sabes si romper a llorar o parar lo que estás viendo. Sinceramente, son pocas las veces que esto me ha pasado a mí, pero he de reconocer, que Aaron Sorkin lo ha conseguido. No, no hablo de 'The Newsroom', su nueva serie para HBO, sino de 'Studio 60 on the Sunset Strip', su malograda visión del mundo de la televisión que NBC emitió durante 2006 y 2007.
'Studio 60 on the Sunset Strip' es la historia de la televisión. Es el funcionamiento del mundillo hollywoodiense. 'Studio 60' es un programa emitido por la cadena NBS (ficticios los dos), algo así como un 'Saturday Night Live' pero emitido los viernes. Vamos a ello:
Siempre que se comienza a ver una serie, o película o a leer un libro, hay primero una presentación, una introducción, algo que te haga conocer a los personajes con los que vas a convivir. En 'Studio 60', todo comienza muy rápido, fulgurante, con el despido del director del programa, cuando este, viendo que la calidad del show es cada vez peor, explota ante las cámaras en directo, ante el estupor de todos los presentes. El realizador no sabe que hacer, ni los actores, cámaras, nadie. Y aquí es dónde todo empieza.
Ahora es cuando se nos presentan a los que nos van a acompañar en esta historia. Principalmente Matt, Danny y Jordan, los tres personajes principales de la serie, interpretados perfectamente por Matthew Perry, Bradley Whitford y Amanda Peet. Los dos primeros son ex-trabajadores del show, que se fueron por problemas internos que nos serán explicados a lo largo de la temporada. Ella, es la nueva directora de contenidos de la cadena, la mandamás, la jefa.
Para no contar nada más de las tramas de la serie (por si os animáis, que deberíais), decir que para mi, lo bueno de esta serie son los guiones. Si habéis visto algo de Aaron Sorkin ('The West Wing', 'The Social Network', 'The Newsroom'), sabréis que sus guiones son la base del éxito. Conversaciones rápidas, con mucho movimiento de la cámara, que te atrapan, que no te dejan escapar de la tele hasta que el capítulo ha terminado.
También las historias, la manera de coger la religión, la política, las drogas, y hacer con ellas historias interesantes, buscando no siempre la felicidad de los personajes, si no la verosimilitud, la realidad. No por que un personaje sea bueno le van a pasar siempre buenas cosas. En definitiva, buenas historias y bien contadas.
Por último, creo que hay que mencionar también las interpretaciones. Creo que Matthew Perry está muy bien a lo largo de los 22 capítulos, gracioso cuando tiene que serlo, pero transmitiendo muy bien en los momentos de mayor carga dramática. Así también habría que nombrar a Sarah Paulson, que da vida a Harriet, la cara más reconocible de 'Studio 60' de cara al público, que en toda la trama en la que interpreta a Anita Pallenberg está estupenda. Y por último Amanda Peet, que a mi (y a más de uno), sinceramente, me encandilaba cada segundo que aparecía en pantalla.
Por todo ello , y por muchas más cosas, me enamoré de 'Studio 60', y os recomiendo que la veáis, ya que es una muy buena serie. Y además, al haberla visto, cumplo un poco más en mi batalla contra las series, en mi enmienda para poder ponerme al día con el pasado.
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