El regreso de Mad Men

El esperadísimo regreso de "Mad Men" (por lo menos para mí), se ha echo esperar demasiado, pero cuando ha llegado, ha cumplido. Y vaya si lo ha hecho.
La manera en la que terminó la 4ª temporada, allá por 2010, hacía presagiar cambios en la vida de los locos de la Madison Avenue. O por lo menos en la de Don. Pero ha habido cambios para todos, no solo para nuestro anti-héroe.

Ni que decir tiene que a partir de aquí, todo está lleno de spoilers de la 5ª temporada, cada uno, que lea bajo su propia responsabilidad.

Por ejemplificar de algún modo, Don tiene nueva esposa, lo que implica que tiene que aprender a convivir con ella (o más bien ella con él y su apetito sexual) tanto en casa como en el trabajo. Megan no es Betty (¡cómo me ha faltado Betty!), que no sabía nada de lo que su marido hacía cuando salía por la puerta de casa. Megan ha visto a Don hacer su trabajo, ha visto como es él tanto en casa como en la Madison Avenue. Megan lo sabe todo, o por lo menos eso piensa ella. Porque vaya metedura de pata hacerle una fiesta sorpresa a Don. Genial la escena donde le pregunta a Peggy que que pensará él, y la reacción de esta (sutilmente le dice: "Los hombres odian las sorpresas"). Yo creo que entre Don y Megan va a haber lío, no hay más que ver como se pelean y se reconcilian en una misma escena, la de la limpieza en ropa interior:



Por otro lado tenemos a la propia Peggy, rodeada de trabajo a más no poder, y encima teniendo a la propia Megan como subordinada. Supongo que eso le va a hacer daño a lo largo de la temporada, ya que tendrá que tener cuidado con que dice o deja de decir. Y además esta es la lista de la clase, o por lo menos en lo que a Don se refiere. ¡Qué rápido se ha dado cuenta de que a Don le pasa algo! Hay una escena en la que lo deja bien clarito: "No reconozco a ese hombre. Es amable, y paciente.".

También tenemos a Joan, que ha visto como cambia su vida teniendo un bebé. Joan, la fuerte del grupo, la inquebrantable, se rompe a la primera de cambio en cuanto cree que la quieren reemplazar. Quiere mucho a su hijo, pero quiere más la independencia que ha perdido. Como se le nota en cuantro entra por la puerta de la oficina lo mucho que echa de menos aquello, el tenerlo todo controlado. Y bien por Mr. Pryce, por hacerselo notar. Por hacerle ver que todos la echan también de menos a ella. Y por hacerla ver, que aún así, todos envidian a su bebé, por tener esa pedazo de madre (por lo menos, yo le envidio). Para mí, en la escena al final en la que duerme al niño en el ascensor, su cara refleja bien todas esas dudas.

Por supuesto no puedo olvidarme de la lucha de poder entra Pete y Roger. Pete, hombre hecho a sí mismo, que ha ido escalando desde que entró en "Sterling Cooper", contra Roger, dueño y señor cuando de politiqueos se trata, pero que a la hora de hacer negocios en realidad no sabe como. Al final, y supongo que será la tónica en esta temporada, Pete se sale con la suya, pero a medias, porque Roger Sterling también sabe jugar a esto. Ah, y estos dos, con problemas maritales. Roger, ya se ha cansado de su "nueva" conquista. Pete, por otro lado, no sabe como hacerle ver a Trudy (me encanta Allison Brie), que no siempre podrá tener todo lo que quiere.

Para ir terminando, añadir que el tema racial va a dar mucho que hablar esta temporada (nos acercamos en tiempo, y mucho, al asesinato de Martin Luther King), solo hay que ver el final del capítulo; y que no se como interpretar el tema de la cartera y Mr. Pryce, con esas caras que ponía al hablar por teléfono. Eso sí, la actuación de Jared Harris, es sublime. Que gran actor. Como todos en esta serie.

Se me quedarán (y se que se me quedan), muchas cosas en el tintero, pero no quiero alargarme más, y tiempo y temporada nos sobra para seguir desgranando esta gran serie. Por cierto, podéis votar en la encuesta sobre la premiere de Mad Men a la derecha de este blog.

Bien por Matthew Weiner, bien por la AMC, bien por todos. Mad Men, has vuelto. Por fin.